
lunes, 31 de marzo de 2008
¿ES O NO ES “TERRORISMO MEDIÁTICO”?




La SIP se ha convertido en una suerte de Orson Welles anunciando la invasión de marcianos que generó pánico en los Estados Unidos aquella víspera de Halloween de 1938, pero multiplicado por el número de medios que controla. En esta ocasión el guión no es una adaptación de la novela La guerra de los mundos, sino del manual que utilizaron para derrocar, entre otros, al compañero presidente Salvador Allende y a Jacobo Árbenz. Qué esperamos aquí… que Chávez corra con la misma suerte para intentar un juicio por terrorismo contra algunos medios venezolanos. Esta es mi percepción, la verdad jurídica tendrán que decirla los tribunales competentes, pero creo que más allá de los congresos hay que tomar acciones. Repito: yo no soy juez, ni quiero serlo… pero tampoco quiero sentarme a esperar que nos invadan los extraterrestres.
viernes, 28 de marzo de 2008
NO ES URANIO… ES CRIPTONITA


Como se sabe, porque ha sido divulgado suficientemente por la televisión y el cine estadounidense, los superhéroes gringos, especialmente Superman, el Capitán América, el Hombre Invisible y hasta los más modernos: Rambo y Terminator son alérgicos a la criptonita, que genera en ellos -cuando se acercan demasiado-, además de fuertes estornudos y salpullidos una reacción letal que acabaría con sus vidas de manera instantánea al simple contacto. Según, las maravillosas máquinas, Lex Luthor que sabía exactamente en que parte del sur de Estados Unidos había caído un meteorito proveniente del planeta Criptón se fue a buscarlo con apoyo de un grupo de Alcaeda, que envió como reesfuerzo Bin Laden. Una vez con el material en su poder atravesaron México con ayuda de los Zapatistas y varios estudiantes universitarios; después Centroamérica apoyados por los Sandinistas… y sobornando en las alcabalas a los funcionarios de los respectivos países en transito con parte de los trescientos millones de dólares que Chávez les envió a las FARC, llegaron a Colombia.
Esta situación tiene de cabeza a las autoridades norteamericanas que para ejercer presión están pensando meter en la lista de terroristas además de Hugo Chávez a López Obrador, Daniel Ortega, Piedad Córdoba, Rafael Correa, Rodríguez Chacín, Evo Morales, Lilia Vera, Cristina Fernández, Vladimir Acosta, Lula Da Silva, el padre Vidal… y hasta el negro Obama, si le gana a Hílary.
¡SOLLOZA VARGAS LLOSA!



Vargas Llosa dijo en Brasil que “Chávez es un ser de otro tiempo, extraviado en un mundo en el que las cosas que hace son caducas”. O sea que, para el intelectual peruano las misiones sociales que ofrecen a los venezolanos de menos recurso, salud, educación, alimentación… en fin bienestar, son caducas. O sea que, la UNESCO reconoció una cosa caduca como la Misión Robinson, cuando declaró a Venezuela libre de analfabetismo. Es decir, que los peruanos que han venido a Venezuela a operarse de catarata, en realidad vinieron a curarse de una ceguera caduca. Con razón, Vargas Llosa decidió no volver a ser candidato, porque según el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) el pueblo peruano, como la mayoría de los pueblos del hemisferio, adolece precisamente de cosas caducas como una educación accesible y de calidad; como un sistema de salud que atienda a los ciudadanos más pobres; como vías de comunicación; como créditos para trabajar la agricultura; como programas de vivienda; y otro montón de cosas caducas, cuya carencia definen –según el PNUD- la pobreza. En resumen, para Vargas Llosa combatir la pobreza es una cosa caduca.
El descaro de Vargas Llosa es tal que se atrevió a decir –también en Brasil- que, felicitaba a Lula Da Silva por hacer “todo lo contrario de lo que dijo que haría”. Agregó que se había “aterrorizado” cuando en campaña Lula expresó las ideas que al final le dieron la presidencia y la reelección. Debemos entender entonces que, según Vargas Llosa, el presidente brasileño ha defraudado a sus electores haciendo lo contrario de lo que estos votaron. En honor al silogismo debemos deducir también que, según Vargas Llosa, los pueblos de América Latina que han elegido gobiernos de izquierda son absolutamente caducos. Es muy probable que la brillantez de Vargas Llosa lo haya hecho quedarse estancado en el futuro en el que descubrió que Asnar, Fox, Sanguinetti y Roger Noriega son tan intelectuales como él.
jueves, 27 de marzo de 2008
SICARIOS IMPLACABLES DEL PERIODISMO (SIP)


La SIP no solo se hace de la vista gorda, con lo cual se convierte en cómplice por omisión de la masacre de periodistas… sino que con la directa explotación de colegas que son pagados con un porcentaje de la publicidad que ellos mismos consiguen, negándoles beneficios sociales que por derecho les corresponden… se convierte en sicario directo e implacable del propio ejercicio del periodismo. Pero en fin los empresarios están defendiendo sus intereses. Lo triste es ver a los colegas a los que se les negó el pago de sus prestaciones en las falsas quiebras de El Nuevo País; a los que les pasó lo mismo en el antiguo Diario de Caracas; a los que botó Globovisión por reconocer la componenda mediática del 11 de abril; a los que recibieron igual trato en RCTV; a los que todavía tienen que hacer de vendedores en la radio para poder cobrar… haciéndole el juego a los verdugos de su profesión.
lunes, 24 de marzo de 2008

En la década de los noventas se hicieron muy famosos entre los periodistas que cubrían las actividades protocolares de instituciones públicas y privadas unos personajes que, aunque de aparente buena presencia, al comienzo de sus apariciones causaban desconcierto tanto a los organizadores de estos eventos como a los fablistanes. Esto se debía a que cuando uno se les acercaba para entrevistarlos respondían que eran invitados pero no voceros… y cuando el personal de protocolo los abordaba para consultar de qué medio eran, respondían que de ninguno. Pero ni los periodistas nos atrevíamos a preguntar a los organizadores quienes eran estas personas, ni los organizadores se atrevían a preguntar a los periodistas. Lo cierto es que los mismos señores… y señoras, estaban siempre en todos los bautizos de libros; inauguraciones de obras; agasajos; aniversarios y cuanta actividad en la que hubiese comida y bebida. Con el tiempo, este grupo de personas… o personajes comenzó a causar suspicacia a los periodistas. Unos decían que eran sensores del gobierno (control que se usó mucho en esos tiempos); otros que eran de la seguridad secreta de las importantes personalidades que por lo general asistían en calidad de invitados especiales a estos actos; inclusive, los más ñángaras llegamos a pensar que eran agentes secretos de la CIA… o el MOSSAD (que también los había). Un detalle que empezamos a observar fue que, cuando salía una bandeja de la cocina con comida o bebida, caían como pirañas y el contenido de las mismas desaparecía antes de llegar a los verdaderos invitados. Pasado un buen tiempo nos enteramos que se trataba de un grupo de astutos cuasi indigentes que se autodenominaban miembros de una organización llamada SIPEM (Sindicato de Invitados Por Ellos Mismos) y por lo cual los miembros de esta distinguida confraternidad se hacían llamar Sipemes. Eran personas sin trabajo, algunos hasta damnificados, otros simplemente vivos, que de una y otra forma consiguieron una chaquetica, una corbatita, una camisita y un pantaloncito presentable para resolver su problema de alimentación diaria. Al hacerse asiduos, recogían los programas y agendas… además revisaban en los periódicos para saber donde iba a ser el próximo cóctel, almuerzo o cena. La picardía se hizo tan efectiva, que llegó un momento en que –viéndose descubiertos-, de una manera absolutamente pintoresca nos contaron la verdad y lograron generar cierta empatía para que al final los periodistas termináramos convirtiéndonos en sus cómplices.

Hoy da tristeza ver como la escena se repite, esta vez con mayor estatus y nuevos personajes. El imperio norteamericano pone el cóctel y la comida para agasajar a los gobiernos de derecha que han venido cumpliendo instrucciones al pie de la letra para intentar evitar el auge progresivo y efervescente de los pueblos que se revelan en pos de sus soberanías y su autodeterminación. Los dueños de las empresas de desinformación, lacayos de los lacayos, representan el equipo protocolar que cuida que se cumpla hasta con el más mínimo detalle… incluyendo las condecoraciones y demás reconocimientos a sus aliados de lujo como Mario Vargas Llosa. Los directores de estos medios, en fin empleados de los dueños del circo, como Eladio Láres, hacen las veces de los reporteros y cumplen con la función de reseñar con sendos editoriales, tanto impresos como audiovisuales las directrices provenientes de Washington… además de armar el despliegue de desinformación que bajo esa línea seguirá envenenando con mentiras la conciencia de muchos de nuestros compatriotas latinoamericanos. Lamentablemente, la versión moderna, estilizada y ya no pintoresca sino caricaturesca de los Sipemes la asumen algunos periodistas del continente que vacían las bandejas de alienación, falsedad y explotación… no con la astucia de aquellos polizones que se ganaron nuestra gracia, sino con la evidencia del estúpido que agradece a quien lo esclaviza… y no por la injusta pobreza que hace desarrollar la inventiva como única forma de supervivencia, sino por la miserable sed de beber del mismo cáliz que bebe su amo.
domingo, 23 de marzo de 2008


Cuando uno recorre las principales ciudades del país; revisa las secciones regionales de los periódicos digitales o impresos; ve los noticieros que desde Caracas presentan información local con sus respectivos corresponsales… o simplemente escucha el discurso de los centenares de precandidatos, llega a la conclusión que ninguno de los actuales gobernadores, ni los anteriores a estos, ni los que tienen varios períodos consecutivos como alcaldes y primeros mandatarios estadales, han podido resolver los problemas seculares de los venezolanos. En Lara se dice que hay problemas con la vivienda, con el deterioro ambiental, la drogadicción, la escasez de agua potable; en Zulia que si los secuestros, el robo de vehículos, la contaminación del Lago de Maracaibo; en Falcón problemas de delincuencia común, derrames petroleros; en Caracas, la basura, la delincuencia común, los homicidios, la droga, el buhonerismo; en Los Andes, problemas con los aeropuertos, que si el contrabando, paramilitares colombianos, secuestros; en Los Llanos, el mal estado de las vías, denuncias de fundaciones chimbas, aumento de los pasajes; en Guayana, es la contaminación del Orinoco, la falta de hospitales y escuelas, la tala y quema indiscriminada; en Carabobo, la delincuencia común azota a los ciudadanos… que si las carreteras no sirven; en Aragua, el robo de vehículos; en Cojedes se habla de policías sicarios; en Oriente se cuestiona y sanciona a alcaldes y gobernadores por corrupción; y un sin fin de etcéteras más, reseñan los medios de información.
Ahora, de todo esto se pretende culpar al Presidente de la República. Por lo menos eso es lo que se deduce de los principales titulares de medios impresos, noticieros de radio y televisión y programas de opinión. Es decir que estos interlocutores de la oposición desconocen las responsabilidades de los gobernadores que cuentan con Secretarios de Salud, Educación, Deporte, Cultura, entre otros. Y que además reciben presupuestos del Gobierno Nacional para solventar los problemas en estas áreas. Por ejemplo, el gobernador del Zulia otorga exclusiva responsabilidad al Jefe de Estado por los secuestros y el alto número de robo de vehículos, cuando este gobernante del Estado más rico de Venezuela tiene una policía regional, una Secretaría de Seguridad y una instancia antisecuestro, por cierto con la asesoría del célebre López Sisco. El del Estado Sucre, Ramón Martínez, quien es médico y gobierna Cumaná desde hace más de quince años, responsabiliza al presidente por el mal estado y funcionamiento de los hospitales. Didalco Bolívar y su muñeco ‘e trapo Ismael García señalan al gobierno nacional de ser responsable del deterioro de las escuelas que pertenecen a su Secretaría de Educación. De igual manera, el resto de los candidatos de oposición culpa a Chávez, hasta de las peleas de vecinos en los barrios de sus localidades.
Entonces, en virtud de que según lo antes dicho, Chávez es el responsable de todos los problemas locales y tomando en cuenta que ya pagó la deuda que, hasta hace unos años era eterna; acabó con el analfabetismo; le dio cupo al medio millón de llamados flotantes universitarios que había a su llegada a través de la Universidad Bolivariana y la misión Sucre… y a los otros quinientos mil que no podían ingresar al bachillerato por no tener recursos y ahora están en la Misión Rivas. Ya que creó la redes nacionales de alimentación Mercal y Pdval; ayudó a sincerar el precio del barril de petróleo; creó la red hospitalaria y de asistencia preventiva “Barrio Adentro”, para quienes morían por falta de recursos económicos e indolencia de los médicos capitalistas; operó a todos los enfermos de catarata del país con la “Misión Milagro”; y creó el resto de las Misiones para ir combatiendo al ritmo de las posibilidades la desigualdad social. Como ya Chávez diseñó la estructura, la forma y los mecanismos para enfrentar los grandes problemas de competencia nacional… yo propongo una reforma constitucional para que el actual presidente no pueda ser reelecto continuamente, sino que sea Gobernador Itinerante, por lo menos un año en cada Estado. Así dentro de veinticuatro años, todos los problemas regionales y locales del país estarían resueltos y entonces podría volverse a lanzar a la presidencia… iniciando de nuevo el ciclo, con lo cual complacería a los que se oponen a la reelección continua… y esencialmente nos libraría de tanto funcionario camburero y tanto alcalde y gobernador incompetente.
viernes, 21 de marzo de 2008
LA ESTUPIDEZ ENTRA POR CASA

Recuerdo que cuando faltaban pocos días para la llegada del año 2000 se fue haciendo cada vez más pública la discusión teológica, histórica, astrológica, apostólica y romana sobre el cambio de milenio y se afianzaron las disputas científicas entre los que pretendían imponer la tesis de que el nuevo conteo debería comenzar el primer minuto del primero de enero del 2000 y los que afirmaban que lo correcto era iniciar el nuevo calendario milenario el primer minuto del primer día, del primer mes… pero del 2001. Mientras los almanacólogos se mataban en esta discusión generando remolinos neurónicos a millones y millones de ciudadanos del mundo, incluyendo a Eduardo Galeano, al genial uruguayo lo que se le ocurrió fue lanzar también su propuesta milenaria: que a partir del nuevo milenio se tipificara en las constituciones, leyes y códigos penales del mundo el delito de la estupidez.

Imagínense por un momento que la propuesta de Galeano se hubiese aprobado. Me imagino que se estarían desarrollando los juicios para determinar los grados de estupidez y las sanciones para cada tipo de estupidez cometida en el reciente conflicto generado por el ataque de fuerzas militares colombianas al territorio ecuatoriano. Es decir, cuantos años de cárcel se darían a los miembros de las FARC por guardar los recibos de pago de trescientos millones de dólares otorgados por Chávez; o cual debería ser la condena por mantener nombres códigos secretos guardados en el computador portátil; o por mala praxis guerrillera, porque todo guerrillero que se precie de serlo tiene que conocer técnicas mínimas de encriptación. Hasta mi amigo Tony Boza que no es investigador ni guerrillero sabe encriptar; o por no usar esa herramienta tecnológica tan de moda en estos días como el pen drive o flash memory, en los que se puede guardar toda la información de la computadora y cargarla en un bolsillo. Y hasta por el delito de no haber visto nunca la famosa serie “Misión Imposible” en la que se enseñaba al televidente como ser un experto delincuente y de la que todo el mundo recuerda la emblemática frase “esta grabación se autodestruirá en cinco segundos”. Habría que agregar a la lista de imputaciones contra las fuerzas insurgentes de Colombia, otra querella por la estupidez de llevarse una computadora para un campamento ubicado en un lugar donde no hay electricidad. Al asesino de Iván Ríos habría que condenarlo por no haber entendido que la oferta del gobierno colombiano fue pagarle más de dos millones de dólares por la entrega –vivo o muerto- del jefe insurgente, pero no librarlo de la decena de imputaciones que pesan sobre él. Ahh! Pero Uribe y su quipo de gobierno no escaparían al juicio del supremo tribunal de su país. Habría que definir cuantos años de condena le tocarían al ministro colombiano de defensa por reconocer que sus misiles son más inteligentes que él, cuando describe el efecto selectivo de los cohetes que despedazaron a la gente, destruyeron el campamento, dejaron boquetes de casi dos metros de diámetro, pero resguardaron a las computadoras. ¡Ajá! Y ¿cuantos años de cárcel habría que meterle al propio Uribe por intentar enjuiciar a Chávez llevando como prueba ante tribunales internacionales las impresiones en papel bond, letra arial, punto cartorce y sin tabulación, obtenidas de las célebres computadoras? ¡Claro! Después de haberles hecho las respectivas pruebas gafológicas que determinaron que los textos fueron escritos puño y letra por el propio Raúl Reyes. En este caso se hablaría del delito de lesa inteligencia en grado de ridículo.

Pero el delito mayor tiene que ser el de creer que el resto del mundo es estúpido, como piensan los de Globovisión y RCN entre otros estúpidos mediáticos que fueron capaces de invertir su maquinaria empresarial, su tiempo y su personal profesional para avalar el intento de imponer con estúpidos analistas, la estupidez de las estúpidas pruebas presentadas por los estúpidos funcionarios del gobierno de Uribe para condenar a Correa y a Chávez. Y en esa gama de clasificaciones penales habría que determinar la pena para los que dicen tantos disparates, que dan pena. En este caso habría que extraditar a Manuel Rosales para que en Estados Unidos lo condenaran a tres cadenas perpetuas, más doscientos años, seis meses, ocho días, siete horas y una noche con Condollezza Rice. Por su parte Miguel Bosé habría cometido el delito de cantar en un concierto por la paz: “seré tu amante bandido… bandido”. Por su puesto Bush, por promover la discusión de tan estúpidas pruebas en el estúpido parlamento de su estúpido país, queriendo utilizarlas para incluir al gobierno de Venezuela en la estúpida lista de terroristas, tendría que afrontar tres veces la pena capital: primero la cámara de gas letal para sacarle el olor a azufre… después la silla eléctrica para ver si con las descargas se le consigue aunque sea un fósil de neurona que permita el estudio de tan extraño espécimen… y finalmente la horca en la torre petrolera más alta de la Exxon Mobil.
viernes, 14 de marzo de 2008
Habrá que creer
HABRÁ QUE CREER EN CHÁVEZ COMO EN FIDEL… QUE NO ES LO MISMO, PERO ES IGUAL

Y me refiero, más que a los que están en franca oposición, a los que están en la revolución pero no con la revolución; a los que –inclusive- llegaron a cargos de funcionarios medios y altos, gracias a su supuesto chavismo, pero comentan solapada y constantemente que el presidente se equivoca en su política exterior; que se equivocó con la propuesta de reforma constitucional; que falla permanentemente en el movimiento de las piezas de su gabinete; que no debería pelearse con la iglesia; que debería admitir que las FARC son terroristas; que no debería atacar a los empresarios explotadores y acaparadores; que no debería apoyar a nuestros hermanos latinoamericanos; que no debería aspirar a la candidatura continua; y entre tantas otras sandeces, hasta que no debería decir que masca la hoja de coca y menos defender la sagrada y milenaria cultura andina, diciendo que la coca no es cocaína.
Y no es que yo crea que con Chávez se cumplió la profética consigna que una vez vi en una pinta callejera: “Cristo viene… y viene arrecho”. No… se trata de creer en quien ha demostrado –poniendo su cabeza en juego- que cuando actúa lo hace de corazón y cuando se equivoca es precisamente porque no es Dios… para fortuna de muchos, porque de serlo ya le hubiera mandado, entre otros a Bush y a Uribe, no siete, sino catorce plagas. ¿O es que no pidió perdón el catorce de abril en la madrugada?; ¿o después de la victoria del referendo aprobatorio no pidió que en vez de celebrar saliéramos a conquistar a los casi cuatro millones que votaron en contra?; ¿o es que no fue el primero en aceptar la derrota “de mierda” de diciembre de 2007?
Lo que pasa es que, ya en nuestro lado pareciera haber más cesudos que en la derecha franca y visible. Los que se creen más papistas que el Papa. Los que exclaman ¿es que acaso él es más inteligente que yo?, tipo la lastima andante de Pablo Medina y otros. Pues sí… yo si confieso que es más inteligente que yo… y por eso está donde está. Yo también me he arrechado muchísimas veces por algunos de sus movimientos, pero confío en que él sabe lo que está haciendo. Yo no soy de los que prefieren a Chávez como el Ché: muerto en combate para entonces sí creer ciegamente en el sucesor de Fidel y citar todas las decisiones que tomó en vida. Yo no… y sé que como yo, millones lo prefieren combatiendo contra la injusticia, la desigualdad, la explotación, la miseria del mundo y el imperio norteamericano hasta que se eleve en las alas de su propia gloria… detrás del más grande comandante en Jefe de la insurgencia popular latinoamericana: Fidel Castro Ruz.
Ahhh! y en cuanto a Alejandro Filio… ya se me está pareciendo a su tocayo Sanz, con el atenuante que por lo menos el español pone su cara, mientras el mexicano pone la de su mujer.
EN RELACIÓN CON LA EX DE CHÁVEZ

domingo, 9 de marzo de 2008
A correazo limpio

Siguiendo con los términos deportivos, en la contienda se enfrentaron dos rivales: en la esquina derecha, el lacayismo imperial y capitalista representado en Uribe y en la izquierda el socialismo bolivariano con su pupilo Correa. El primero teniendo como entrenador a Bush y el segundo a Chávez. A la diestra se escuchaban los gritos de la barra de paracos y vendepatrias que aupaban a su púgil y a la siniestra la insurgencia popular hacía lo propio con el representante meridional. Hay que destacar el excelente arbitraje de Leonel Fernández.
Para empezar Correa logró, con ayuda de Chávez , imponer un punto único de discusión en la Asamblea… antes, casi por unanimidad, la OEA aceptó que Uribe violó la soberanía ecuatoriana; en la cumbre del Grupo de Río todos condenaron la agresión Uribista; el gobierno colombiano tuvo que emitir un comunicado en el que reconoce la violación de la soberanía colombiana; el presidente neogranadino tuvo que pedir disculpas una y otra vez; el mayor ridículo es que nadie en el planeta y mucho menos en tan importante encuentro se atrevió a dar crédito, ni defendió las estúpidas pruebas de las computadoras antimisiles, lo cual dejó a Uribe como el verdadero Bart Simpsoms latinoamericano; en la resolución leída por el presidente del G-R, Leonel Fernández, no se menciona a las FARC como terroristas, como pretendía Bush y sus secuaces; un detallito menor, pero que también cuenta es que al final… al momento de “la paz esté contigo”, quienes le dieron la mano a Uribe no tuvieron más de cinco segundos de contacto, mientras a Correa y a Chávez los abrazaron; otro punto a favor de la izquierda fue que tanto el moderador como varios de los jefes de Estado expresaron tomar la palabra de su colega venezolano para proponer el acuerdo final; tal fue la cayapa que, Daniel Ortega aprovechó para sacarle a Uribe concesiones en relación al diferendo por las islas San Andrés; también vale decir que la asamblea le permitió a Chávez llevar como invitada especial a la madre de Ingrid Betancourt, ícono del proceso por la paz, quien por cierto, aunque no la dejaron hablar, todos saben que fue a exigirle al presidente colombiano que permita la salida pacífica al conflicto… o lo que es lo mismo fue a condenar las acciones bélicas que dieron origen al impase diplomático.
En resumen el hijo de Manuela Sáenz puso a pedir cacao al ultimogénito de Santander quien al final tuvo que salir con su rabo entre las piernas a ver a través de RCN las nuevas pruebas de vida que las FARC enviaron al gobierno venezolano como muestra unilateral de querer contribuir a lograr la paz en Colombia.
sábado, 1 de marzo de 2008
Necesario es vencer… aunque nos cueste la vida


EL MIEDO ES LIBRE, PERO NO SOCIALISTA
Ni Cristo, ni el Che… necesario es vencer. Esta pareciera ser la premisa de muchos quienes hoy, boina roja a cuestas, han empezado a expresar públicamente lo que de seguro ya sentían y pensaban desde siempre. Y digo de muchos, porque estoy seguro que en esta guerra –mediática y comunicacional en su esencia- algunos lo que están es confundidos, tal vez por falta de formación ideológica, lo cual creo es la verdadera carencia de este proceso revolucionario. Esos que hoy analizan semántica y etimológicamente la consigna Fidelista y Guevariana para descalificarla, atribuyéndole un supuesto culto a la muerte, no están más que dejando aflorar sus temores al sacrificio que exige una verdadera lucha contra la desigualdad; la exclusión; el egoísmo; el personalismo; el apego a lo material; la impuesta perversión de querer ser rico para poder tener el celular más lujoso, el carro más carro, ropa de marca… en fin, el maldito sueño americano hollywoodense, expresión caricaturesca pero fiel del consumismo capitalista salvaje.
La gran mayoría de quienes en esta coyuntura de pasiones encontradas dentro del movimiento revolucionario, aparecen en los medios del Estado pretendiendo corregir al Comandante en Jefe y proponiéndole cambiar la consigna “Patria, Socialismo o muerte”, son los mismos que fueron a las marchas y concentraciones a favor del “Sí” pero votaron por el “No”… o no fueron a sufragar el 2 de diciembre de 2007; Los mismos que por su fragilidad ideológica o su clara, pero reservada, oposición al proyecto socialista se aterraron con la campaña de mentiras de los medios de oposición sobre la propiedad privada; los que de forma solapada indujeron el mismo temor a quienes sin tener nada que perder, pensaron que perderían todo.
Este rechazo público a nuestra consigna comenzó –con un propósito bien claro- en los medios de oposición por parte de los sesudos de franca derecha, pero hoy a los quintacolumnas concientes e inconcientes del proceso revolucionario se les prendió la luz y les pareció que el propio Chávez les puso en bandeja de plata la fórmula para sustituir semejante consigna: la cita de José Félix Ribas, “No podemos optar entre vencer o morir, necesario es vencer”. ¡Ya está! resuelto el dilema. Nada de “Patria o muerte”, yo prefiero morir de viejo… y si es con una finquita y una Hummer, mejor.
Que manera más ligera, irresponsable, cobarde y en muchos casos rastrera de evadir el compromiso histórico de luchar hasta las últimas consecuencias por la libertad y contra el imperialismo. Y pensar que el prócer de La Victoria murió a los 40 años de edad. Es decir que, luchó “Patria o muerte” por nuestra independencia hasta su captura y ejecución y no por eso deja de hacer honor a su consigna. A los socialistas Light nos se les ocurre pensar que José Félix lo que quiso fue erradicar de sus tropas el miedo para que no se amilanaran ante la posibilidad de la muerte. Que probablemente quiso dejarnos el mensaje eterno de que no nos rindiéramos a pesar de los caídos, los fracasos y las traiciones. Y que igual que Bolívar, Tupac Katari y el Che, sabía que la lucha no terminaba con sus muertes físicas y era necesario vencer a pesar de eso. Tal vez los temerosos preferirían “Patria o rendirnos” … o quizá “Patria pero con vida”… ¿o será que se identifican con esa consigna que –por cierto- ahora tengo la duda de su origen, porque no sé si vino de la derecha exógena o la endógena: “Patria, Socialismo o Hummer”? Los verdaderos revolucionarios respetamos y creemos en José Félix Ribas e igual que él no nos asustamos ante el fantasma de la muerte porque ni siquiera ella ha podido matar la idea. Ojalá todos tuviéramos la dicha de morir bañados de gloria más que de sangre… son esos los que no pueden llamarse muertos, los demás ya son cadáveres, aunque estén vivos. Así que: No podemos optar entre vencer o morir, necesario es vencer… aunque nos cueste la vida.